TORTAS FRESCAS Y ARTESANALES EN NININA
Reconocido por su cocina casera y su compromiso con los ingredientes nobles, el deli&café Ninina cuenta con una tentadora variedad de tortas que suman frutillas frescas. Cada una de estas creaciones combina el característico sabor ácido y jugoso de la fruta con diferentes texturas, para crear tortas originales y sabrosas. Elaboradas con harinas y azúcares orgánicos, pueden disfrutarse por porción o enteras, como la clásica tarta de frutillas, que parte de una base de masa brisée crocante, está rellena con una suave crema pastelera y cubierta con frutillas frescas seleccionadas. También destaca la Madame Chantilly, que intercala capas de bizcochuelo de vainilla con frutillas frescas, crema chantilly y merengue; o La Perdición, que suma una base de merengue crocante, mousse de chocolate, bizcochuelo de cacao, crema chantilly con frutillas frescas y un topping generoso de frutillas picadas.
Direcciones: Gorriti 4738, Palermo; Holmberg 2464, Villa Urquiza; El Solar Shopping, Av. Luis María Campos 901, Las Cañitas.
HELADOS, POSTRES Y UN ESPECIAL FUERA DE CARTA EN JOPO
La heladería artesanal JOPO se suma a los festejos por el Día de la Frutilla con una propuesta fuera de carta: un baked Alaska en formato disco, relleno con su helado de crema de frutillas y cubierto con una generosa capa de merengue quemado, decorado con estrellitas. Para quienes deseen explorar otras alternativas, ofrecen sabores tradicionales y de elaboración propia como frutilla al agua y frutilla a la crema, que se pueden disfrutar en vasito o cucurucho. También sorprende con originales paletas, como la de corazón de frutillas, que combina helado de crema de frutillas, coulis de frutillas y una cobertura de chocolate con trocitos de fruta. Otro imperdible es el Honey Bread, un postre que lleva una tostada brioche caramelizada, coronada por helado Franui y acompañada con bombones Franui, frutillas frescas y un toque de miel. Y para los fanáticos del estilo americano, está disponible la clásica milkshake hecha con su helado de frutillas.
Dirección: Juramento 5299, Villa Urquiza.
PETIT Y MERMELADA CASERA EN TALLARICA
Entre las piezas artesanales que ofrece la pastelería Tallarica, el petit de frutilla y vainilla es uno de los más elegidos al momento de la merienda. Esta creación de su dueña y chef Daniela Tallarico está hecha con una masa sablée de vainilla, rellena con crema de vainilla, mermelada de frambuesa, curd de frutilla y frutillas frescas, y se puede disfrutar en su local de Belgrano. Ademá de esta preparación 100% artesanal, la casa también cuenta con una tentadora mermelada de frutilla casera, que se puede degustar con el yogur natural con frutas frescas, granola y miel, o con la tostada francesa, acompañada de crema chantilly y frutas de estación.
Dirección: Av. del Libertador 6025, Belgrano.
MILKSHAKE, LICUADO Y SMOOTHIE EN CIRO
En Ciro, la cafetería y restaurante de inspiración italiana, la frutilla es uno de los ingredientes principales al momento de crear bebidas frescas, naturales y cargadas de sabor. Quienes visiten sus locales de Palermo y Puerto Madero tendrán la posibilidad de acompañar sus desayunos y meriendas con tres tentadoras propuestas: un cremoso milkshake de frutilla, preparado con helado de la casa 100% artesanal, disponible para consumir en vasito o pote por peso, y un refrescante smoothie de frutillas y frambuesas frescas, o un clásico licuado de frutilla y banana. Esta noble fruta también se puede degustar como relleno de cornetto con de nutella y banana, y también en los waffles elaborados con harina de avena y cacao amargo, servidos con helado y nutella.
Direcciones: Pierina Dealessi 1350, Puerto Madero; Guatemala 4798, Palermo.
REVERSIÓN DE UN POSTRE CLÁSICO EN RUFINO
En el corazón de Recoleta, la moderna parrilla Rufino, ubicada dentro del hotel Mío Buenos Aires, presenta una visión vanguardista del tradicional postre de frutillas con crema. El chef ejecutivo Jerónimo Bichi ha concebido una creación que descompone los elementos típicos para ofrecer una experiencia sensorial única: crumble de almendras crujiente acompañado de frutillas maceradas en especias, creando un juego de contrastes en cada bocado que se equilibra con la suavidad de la crema chantilly y el coulis de frutillas y aceite de oliva, que añade un toque inesperado al plato. Para maridar esta propuesta, sugieren un vino rosado ligero, un espumoso de notas dulces, o un vino de cosecha tardía, aunque un Pinot Noir joven y aromático también resulta ser un agradable maridaje para esta receta de autor.
Dirección: Av. Pres. Manuel Quintana 465, Subsuelo del Hotel Mío Buenos Aires, Recoleta.